Sueños en los bolsillosHola. ¡Qué bien verte en mi blog! Hoy voy a hablar de sueños. ¿Te apetece quedarte?

Ya que estás aquí, te confesaré que desde hace varios años me paseo con mis sueños en el bolsillo. Puede que te preguntes si eso es necesario y yo te digo que no sólo es necesario sino que es imprescindible. El ritual que sigue, sin saltarse ningún paso, es esencial para estar más cerca de alcanzarlos: lo primero que hemos de hacer es reflexionar sobre lo que realmente queremos, desde las cosas más pequeñas a las más grandes, incluyendo los objetivos a corto, medio y largo plazo; después escribirlos en un papel y por último guardarlos en un lugar al que podamos recurrir siempre que necesitemos un aliento extra, un recuerdo de cuál es la razón de nuestro esfuerzo. Yo hice eso y ahora mis sueños están en mis bolsillos. Es mi hoja de ruta. La razón por la que lucho cada día, le robo horas a la noche, paso tantas horas frente al ordenador y mi familia conoce más mi perfil derecho que el izquierdo –que es el que les ofrezco mientras que ellos están en el sofá y yo de espaldas trabajando frente a la pantalla-. 

Mi mujer, Marga, cuenta como anécdota que durante los años que pasó como jefa de prensa de un importante político, éste recurría semanalmente al mismo papel que llevaba guardado en el bolsillo de la chaqueta donde habitualmente asoma el pañuelo en los trajes para ver cómo iban las tareas que había encomendado a cada uno de los miembros de su equipo. En aquel papel se detallaba el trabajo –los sueños- que él creía esenciales desarrollar durante su tiempo al frente del departamento que dirigía con gran vocación de servicio público.

Hoy, que la imagen de los políticos está denostada, y mi mujer por su experiencia laboral sigue tratando con ellos y de todos los partidos… aunque reniega de casi todos porque la mayoría sólo busca su propio interés, todavía sigue confiando en la vocación de aquél y en la hoja de ruta que significó el  papel arrugado y borroso con el que terminó aquella legislatura. Evidentemente no cumplió con todos sus sueños -sus ambiciones, todas ellas en beneficio de los ciudadanos, eran elevadas y el tiempo limitado- pero sí cumplió con muchos y todos ellos estaban en el papel.

Aquella anécdota que ella cuenta me sirve hoy para justificar que no soy el único que pasea un papel arrugado arriba y abajo, que lee y relee, que tacha cuando ha conseguido pequeños logros y que suma otros cuando le surgen nuevos anhelos. Hasta ese político al que tanto quiere Marga lo hace… me consta que lo sigue haciendo en su actual cargo también. Ahora los sueños son distintos… aunque el fin, para él, dentro de su responsabilidad, siempre es el mismo: el bienestar de los ciudadanos.

Hace años leí ‘El Alquimista’ de Paulo Coelho. Entonces no me dedicaba al Network Marketing ni nada que se le pareciera. Es más, entonces yo no tenía sueños. Dejaba que otros soñaran por mí. Vivía y no me preocupaba si aquello era lo que quería, lo que me gustaba, si me hacía feliz… El libro me gustó pero creo que no lo entendí. Ahora sé que no lo entendí.

Aquellas palabras mágicas que hoy tanto significan para mí “cuando una persona desea realmente algo, el SueñosUniverso entero conspira para que se pueda realizar un sueño. Basta con aprender a escuchar los dictados del corazón y a descifrar un lenguaje que está más allá de las palabras, el que demuestra lo que los ojos no pueden ver”… que se guardan dentro de ‘El Alquimista’ son ciertas. Es el poder de la atracción. Lo que tan sabiamente también ha sabido retratar ‘El Secreto’, lo que cuenta hasta hacerte morir de la risa por su aplastante realidad el coach Emilio Duró igual en un programa de Buenafuente que en una sesión para ejecutivos de una gran empresa. Si tienes sueños, si los visualizas, si trabajas para conseguirlos, llegarás a ellos.

Eso yo lo he aprendido con el Network Marketing. Es más, yo sé que alcanzaré mis sueños a través de mi negocio de networking. Tal y como está el mercado actual es la única oportunidad que yo tengo a mi alcance. Sé que si tengo claros mis sueños y trabajo para conseguirlos con las herramientas adecuadas, mis sueños se harán realidad. Y estoy seguro de que si tú quieres, los tuyos también…

Publicidad